LA FAMILIA
A las puertas del Bernabéu, punto de encuentro y kilómetro cero de MRS 2013, las familias despiden a los expedicionarios. Paradójicamente, yo me encuentro con mi “familia” de expediciones anteriores. Personajes peculiares y complejos a los que me hace una ilusión loca volver a ver. Desde Sevi, el avezado experto en rescate y emergencias, a los esforzados astrónomos contadores de historias capaces de sortear el sopor de los agotados chavales con sus charlas nocturnas, pasando por Borja, el monitor diplomático, o Bea, la monitora cooperante que me hizo contarle una vez mi vida (Error que no volverá a cometer, a buen seguro), o Alfredo, también monitor, abogado y aún así buena persona, o los ilustres Joaquín y Nacho, los conductores de los autobuses, con los que coincidí en la edición de MRS de 2009, o el gran Asenjo, el veterano maestro de Historia y de historias, que tantas enseñanzas regala a los expedicionarios, la mayor parte de ellas fuera de programa académico. Y muchos más, como Font, el bombero que hace magia preparando comidas en donde no se puede hacer nada más que tumbarse uno a morirse de hambre, o Curro el indescriptible, o… Todos estos y muchos otros que no conozco y que dentro de nada, aunque sólo los vea una vez al año, serán ya parte de mi familia.
CUERPO DOMINA A MENTE
Raquel y Paula, dos de las expedicionarias, montan en los sitios de delante del autobús, sitios reservados a los miembros del equipo, porque dicen que se marean yendo atrás. Antes de salir de Madrid ya están profundamente dormidas. Ellas no saben todavía que durante el viaje hay que ganar horas de sueño a los días donde sea y como sea, pero sus cuerpos parece que se lo han olido.
EL PESO RELATIVO DEL AGUA
Antes de iniciar la marcha desde Cercedilla a La Granja de San Ildefonso, siguiendo el trazado de lo que se supone era el camino madrileño de los peregrinos a Santiago, se reune a los chicos y a pesar de que iban advertidos sobre la necesidad de llevar las cantimploras llenas, se les pregunta si hay alguien que no tiene agua. Tres manos se levantan por encima de tres caras avergonzadas, que se llevan una de las primeras reprimendas. No hay cuidado, en Marruecos a nadie se le olvidará llevar agua. La importancia de llevarla o no, aquí en España, es relativa. Allí es absoluta.
EL CAMINO
La marcha que lleva de Cercedilla a La Granja contiene en sus 25 kilómetros: Tres fuentes de agua fresca, restos de una calzada romana, un puente romano, el solar en ruina llamado Casarás, que era pabellón de caza del secretario de Felipe V, Francisco de Eraso (Casa Eraso-Casarás), además de unos paisajes maravillosos. Por desgracia, en su inicio contiene también la ascensión a un collado que resulta bastante menos relajada que lo anterior.
METÁFORA 1
Qué fácil sería señalar al camino de Santiago como metáfora de la ruta que ahora iniciamos. Gentes de diversos lugares, de distintos caracteres y procedencias con un mismo objetivo, camino iniciático donde lo espiritual y lo físico conviven en una misma fórmula magistral, etc, etc. Tan fácil sería, que voy a hacerlo. Ya lo he hecho, incluso. Porque, llámenme moñas, la metáfora es buena y certera.
CONVERSACIONES AERÓBICAS
Podría mentir y decirles que mis lamentables y continuas paradas en la ascensión al collado han sido fruto de una estrategia encaminada a ir escuchando las conversaciones de los grupos que me sobrepasaban. No lo voy a hacer, pero sí que es verdad que he podido escucharlas, y la variedad era inmensa. Desde los estudios universitarios o no universitarios, a las vacaciones, las fiestas, los ligues de verano, e incluso de la situación social en Francia o de la posibilidad de que un hombre sobreviva a una larga misión espacial sin sufrir trastornos físicos. Asuntos que, desde luego, me han sorprendido mucho menos que el hecho de que sean capaces de hablar mientras ascienden.
ARTILLERIA LIGERA
En Segovia nos recibe, cómo no, el acueducto. Además, un redactor y un fotógrafo de un periódico local, y la tremebunda visión de “Cándido”, ofreciéndose goloso a los hambrientos expedicionarios. Bueno, en realidad quien nos recibe de verdad es el Cuartel Academia de Artillería, que nos ofrece sus instalaciones para acampar. Nos abren, todo amabilidad, sus pabellones, con interesante contenido histórico y con un continente precioso, fruto de la adecuación de un convento hecho propiedad del estado merced a la Desamortización de Mendizábal. Las comodidades que tenemos aquí, aunque durmamos en el suelo, no van a ser la tónica del viaje.
EDIFICIOS HUMANOS
Antes de cenar la “tradicional” fideuá que prepara Font, nos desplazamos al Monasterio San Antonio el Real, en cuya entrada recibimos una magnifica conferencia sobre la arquitectura segoviana y sus orígenes. El ponente es un arquitecto, Alberto García Gil, al que, en palabras propias, “lo que menos le gusta es la arquitectura”, y es que es un gran aficionado a la Historia. Miembro activo del Aula Cultural Hontanar. Su charla es amena pero breve, aunque algunos más profundizamos en detalles con él después de que acabe. Nos hacemos una foto. Yo me quedo con las ganas de ofrecerles otras de las muchas metáforas sobre el viaje que voy a acabar escribiendo. La frase de García Gil diciendo que a los edificios no hay que juzgarlos por su belleza exterior, sino por lo que tienen detrás, su historia, sus símbolos… Mañana nos despertaremos temprano, porque nos queda un viaje de autobús hasta Algeciras que siendo austero merece el calificativo de épico. Y hoy me siento poco austero.
Crónicas Expedicionarios
María Ronda, 19/08/13
Seis y media de la mañana, aún parece que siga soñando, pero no, es verdad: comienza la aventura Madrid Rumbo al Sur.
Los nervios se sienten en el Bernabeu y ninguno parecemos tranquilos ante lo que nos espera. Aunque no hayamos salido de España, he conocido a mucha gente y estoy ansiosa por conocer a más y mejor.
La marcha de hoy, desde Cercedilla hasta la Granja de San Ildefonso ha sido un poco dura. No estábamos aun acostumbrados a las botas y más de uno ha tenido que parar para poner tiritas antiampollas. Larga, intensa, pero preciosa. A veces se me olvidan las maravillas que tengo a treinta minutos de casa. Volveré por aquí.
Llegar a Segovia ha sido pura euforia. En el cuartel de Artillería del Ejército de Tierra nos han recibido con los brazos abiertos. Sin duda lo más chocante era ver cómo todos los militares llevaban nuestras botas.
Después de ver los distintos museos del cuartel y una conferencia de la historia de Segovia, hemos agradecido una buena cena. Ya solo queda lavarse un poco y prepararse para dormir.
Mañana nos espera un largo viaje rumbo a Marruecos.
Julia Sofía López Sahagun, 19/08/13
El Día comenzó con muchos nervios, con muchas ganas y mucha ilusión. A las ocho de la mañana nos habían citado a todos los expedicionarios en el estadio de fútbol Santiago Bernabeu. Al subir al autobús pusimos rumbo a Cercedilla. Pasamos el día recorriendo una etapa del camino de Santiago. La marcha duró horas y horas, fue bastante duro, tuvimos que pasar una antigua vía romana, con un camino lleno de piedras pudimos observar unas ruinas abandonadas en medio de aquella vía romana. El resto de la marcha fue muy entretenida, todos aprovechamos para conocernos, tuvimos bastante entrenamiento. El paisaje fue muy bonito, me gustó mucho poder ver desde arriba de aquella montaña el paisaje tan lleno de vegetación. Pasaban y pasaban las horas y los kilómetros, se notaba cada vez más, el cansancio y también la molestia de las ampollas, pero íbamos todos tan contentos e ilusionados que aguantamos hasta el final.
Por la tarde, ya bastante tarde llegamos a Segovia. Pasamos por el acueducto de Segovia, era muy bonito, y al verlo desde tan cerca parecía gigante. Subimos hasta una pequeña calle hasta llegar a un antiguo cuartel militar. Tuvimos una visita guiada por el cuartel, y una pequeña charla. Cuando terminó, fuimos a instalarnos al polideportivo del cuartel, tuvimos pocos minutos ya que fuimos a un hotel que antiguamente fue un monasterio.
Allí tuvimos una pequeña charla, de un arquitecto Historiador que nos explicó el origen y el nacimiento de Segovia. Al terminar aquella charla regresamos al cuartel militar a cenar, en la cena todos compartimos nuestros mejores y peores momentos del día, yo escuchaba lo que decían todos, algunas cosas eran interesantes, pero otras no mucho, pero en general fue una cena entretenida.
Poco más tarde tuvimos una charla que dio un monitor muy majo donde nos comentaba las normas y nos presentaba la organización. Todos los monitores parecían muy majos. Al terminar la charla todos estábamos muy cansados y fuimos directos a nuestro saco de dormir, mucos se quedaron dormidos enseguida mientras que otros se quedaban pensando en aquel día y en la gran aventura que acababa de comenzar.
Isabel Montejo López, 19/08/13
Hoy el día ha empezado con un buen abrazo de mi hermanita, mi padre y mi madre. Eso me ha dado mucha energía además de todos los mensajes que todavía me llegaban de mis amigos felicitándome por mi cumpleaños; Me han llenado de alegría y fuerza. A lo largo de la caminata oía comentarios de rumberos hablando lo que les había preparado su madre y pensé en lo tanto que la necesitamos y que en este viaje aprenderemos a amar como mamás y tendremos que cuidar unos de otros.
La clave para empezar y continuar este increíble viaje es la del respeto y sacar lo mejor de cada uno. Durante la caminata de camino a la Granja viví unos momentos muy bonitos con dos rumberos. Freddy y yo nos nombramos compañeros de penas y alegrías y me dijo que era como su mamá y eso me gustó. Además me dijo que sonreía mucho y rebosaba felicidad y es totalmente cierto porque estoy muy agradecida de este viaje y de todo el amor que recibo de todo el mundo que me saludan con una sonrisa, me alegran con un “¿qué tal?” o con un abrazo.
El momento más especial del día fue cuando me desperté en el autobús y vislumbre delante de mí el acueducto de Segovia, que me trae muchos recuerdos. Estaba feliz de andar al lado de él y de atender a la charla en el Monasterio de San Antonio del Real. Lo que me ha gustado saber, como dato curioso, es que el castillo de la cenicienta de Disney se inspiró en el alcázar de Segovia para idealizarlo en el maravilloso castillo de la Cenicienta. Nos incitaban a enamorarnos de Segovia, pero me dí cuenta de que yo ya lo estoy. Otro regalito del día era ver la luna llena, comer fideua, y bueno mamá… y tus bocatas!
Con los ojos bien abiertos para poder mirar, pero ahora cansaditos para dormir. ¡Buenas noches!
Erika Kvalem Soto, 19/08/13
Hoy ha sido un día muy loco. Supongo que como todos los que seguirán de ahora en adelante. Hemos cambiado la rutina de piscina y siesta por la alarma de las seis y las botas. Desde que salimos de casa esta mañana han pasado muchas cosas.
Primero, el reencuentro con compañeros que conocimos en las pruebas y con los que ya compartíamos algo más de la camiseta. Todos igual de nerviosos hemos puesto Rumbo al Sur. Comenzando por una ruta desde Cercedilla con la que hemos estrenado nuestras estupendas botas y nuestras preciosas mochilas.
Aunque al principio nos ha costado, hemos llegado a la granja sanos y salvos.
En Segovia, algo después y tras bajarnos del autobús; todos con una mochila delante y otra detrás, llegamos a la Escuela de Artillería, donde nos acogen para pasar la noche en el gimnasio; algo que me parece realmente un regalo pensando en lo que nos depara los próximos días.
Y ahora, ya con el estomago lleno de fideua y mientras mis compañeros se curan las ampollas y se preparan para mañana, yo me dedico a escribir con el propósito de no olvidar todas las aventuras que he vivido hoy. Mañana nos espera un día duro.