CRÓNICA CARMEN ORTEGA. 1ª FASE CERRO MURIANO CÓRDOBA

Las puertas del autobús se abren, y con ello una bofetada del calor cordobés nos azota de frente. Después de tres meses de espera, se nota en el ambiente la ilusión por empezar. Aunque en ese momento somos completos desconocidos, durante los siguientes días haremos grandes amigos.

Cada día a las 6:30 de la mañana toque de diana, y al ritmo de las marchas militares nos preparamos para el deporte matutino. Como todos los días, al deporte le sigue el desayuno, momento para sentarse juntos y compartir vivencias. El resto del día aprendemos sobre la cultura española, la supervivencia y el régimen de la expedición en Senegal. Acabamos cada día con el taller de radio. Aunque muchos no participamos, nos tumbamos a escuchar las crónicas del día escritas por algunos expedicionarios. Lo que proporciona un momento de calma en medio de la tormenta de estos días, y nos permite parar y reflexionar sobre los acontecimientos del día.

Durante tres días ponemos a prueba no solo nuestro cuerpo, si no nuestra mente, nuestros valores y compañerismo. Aprendemos sobre la importancia de tenerse el uno al otro, la importancia de caerse y levantarse, pero también de tener a alguien que te tienda la mano en los peores momentos y te ayude a seguir adelante. Por muchos moratones que tengamos, falta de sueño, calor o hambre, seguimos con una sonrisa. Gracias a ello aprendemos a apreciar los pequeños momentos en los que pese al cansancio intercambias una carcajada. Aprendemos que juntos somos más fuertes. Que pese a nuestras diferencias <Ninguno de nosotros es tan bueno como todos juntos > (Ray Kroc).

Dicen que toda bonita historia tiene un final. Y esta primera parte de nuestra historia ha llegado a su fin. Quién nos diría hace tres días que íbamos a comer raciones militares, visitar Córdoba o conocer a tanta gente que ahora llamamos amigos.

La primera fase llegaba a su fin, y uno a uno, íbamos partiendo a nuestras casas, agotados por los eventos de los últimos días, pero con más ganas que nunca de seguir nuestra aventura muy pronto. En Córdoba habíamos hecho nuevos amigos, aprendido, sufrido, pero también reído. Ahora sí, estábamos listos para ir a Senegal. Y poco a poco nos íbamos dando cuenta de que lo que estábamos viviendo no era un sueño, sino una realidad.

Soy Carmen Ortega Martín y esta es mi primera crónica de España Rumbo al Sur 2023.

comparte

Facebook
Twitter
LinkedIn

patrocinador principal

patrocinadores

LOGOTIPOS QUALITAS ENERGY_V2-11 (2)

colaboradores

NOTICIAS RELACIONADAS